prev next front |1 |2 |3 |4 |5 |6 |7 |8 |9 |10 |11 |12 |13 |14 |15 |16 |17 |18 |19 |20 |21 |22 |23 |24 |25 |26 |27 |28 |29 |30 |31 |32 |33 |34 |35 |36 |37 |38 |39 |40 |41 |42 |review
Como se señaló con anterioridad, alcohólicos que no presentan tratamientos con co-morbilidades, la mayoría presentan dependencia a drogas ilícitas, dependencia a nicotina y desórdenes de personalidad antisocial, desórdenes del humor y afectivos (especialmente depresión mayor), y desórdenes de ansiedad (Grant et al., 2004, Drug and Al Dep., 74:223-234). Aunque el desarrollo de estrategias farmacológicas para tratar co-morbilidades con alcohol está en una fase temprana, algunos avances son resaltados. Como se señaló previamente, disulfiram para combinación de dependencia al alcohol y a la cocaína, se muestra promisoria, y la investigación se encuentra en curso para evaluar topiramate para la misma población. Similarmente, investigadores en los últimos 20 años han demostrado que los inhibidores selectivos de la recaptación de la serotonina (SSRI) aminoran los síntomas de depresión, ansiedad o ambas, en algunas subpoblaciones de pacientes dependientes del alcohol (Pettinati et al., 2000, Alc. Clin. y Exp. Res., 24(7):1041-1049) e, importantemente, no disminuyen el umbral a convulsiones como lo hacen los antidepresivos tricíclicos. Sin embargo, a pesar de algunas indicaciones positivas iniciales. SSRI no ha mostrado ser de beneficio en tratar los síntomas principales de la dependencia al alcohol (Garbutt et al. 1999, JAMA,281(14):1318-1325; Nunes y Levin 2004, JAMA, 291(15):1887-1896). Actuales estudios apoyados por NIAAA exploran el uso de medicamentos existentes para tratar co-morbilidades como las señaladas en esta diapositiva.

La elevada co-morbilidad entre la dependencia al alcohol y al tabaco, tienen problemas especiales para el tratamiento del alcoholismo. Además de la exacerbación de los riesgos a la salud, tabaquismo afecta el proceso y curso de la recuperación del alcoholismo y puede servir como un desencadenante de la recaída. Por lo tanto, el tratamiento farmacológico de primera elección para la dependencia al tabaco, es el reemplazo de la nicotina y el bupropion, han mostrado eficacia limitada en fumadores alcohólicos; por consiguiente, se necesita desarrollar terapias medicamentosas efectivas para co-ocurrencia de la dependencia al alcohol y a la nicotina.